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Capitulo 2: Todo se
arregla, o empeora.
Dike, que finalmente optó por un
pantalón de corderoy beige y una polera negra, se despidió de sus padres y llevó
a Taumante al ciber. El día se presentaba muy ventoso y con algunas nubes que
amenazaban con mojar a todos en cualquier momento.
Como ya es costumbre para ella, arriba a la plaza de las
rosas un minuto antes del encuentro. Pero, para su sorpresa, allí estaba Nereo.
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Tenía una remera amarilla debajo de un chaleco corto beige, un jean oscuro,
zapatillas negras y estaba bañado. Parecía un príncipe >>
Nereo:- (Sonriendo) Hola Dik, llegaste justo a tiempo.
Dike:- Si, como habíamos arreglado.
Una vez que se saludaron con un beso en el cachete, Nereo le
enseñó el banco de plaza y la invitó a sentarse.
Dike:- (Acomodando el cuello de su polera) Bueno, espero que
sea algo importante.
Nereo:- Si, es muy importante, causa un impacto y a la vez
sorpresa.
Dike:- (Mirándolo de reojo) ¿Acaso no es lo mismo?
Nereo:- ¿Qué cosa?
Dike:- ¿Estás hablando en serio?
Nereo:- Sigo sin entender…
Dike:- Por favor… En fin… Yo también tengo una sorpresa para
vos.
Nereo:- (Contento) ¿Cuál? ¿Cuál es?
Dike:- (Mirando a lo lejos) Espera un poco.
En ese momento llegó Galatea que se detuvo al verlos a los
dos sentados.
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Como siempre, Galatea viste súper linda.
Tiene el físico perfecto para llevar una pollera corta, con botas luciendo sus
piernas tapadas con medias oscuras. Cómo me gustaría tener su cuerpo. De todas
formas, con esta personalidad, jamás usaría esa ropa. >>
Dike:- Ahora si estamos completos.
Nereo intercambió miradas entre la recién llegada y Dike.
Tanto él como Galatea no comprendían qué es lo que Dike pretendía con esta
reunión.
Nereo:- ¡Qué linda sorpresa Dik!
Galatea:- (Cruzando los brazos) ¡¿Qué?! ¡¿Soy una sorpresa?!
Dike:- No se alarmen chicos, Nereo quería hablar conmigo y vos
también - mira a Galatea - Entonces
acepté las dos invitaciones. Así aclaramos un poco las cosas, ¿no?
Galatea:- Me parece bien.
Nereo:- ¿Qué es lo que hay que aclarar?
Galatea:- Obvio, que ya no podemos estar separados.
Nereo la mira serio con semejante declaración y luego se ríe
a carcajadas.
Nereo:- (Mientras ríe) Es una broma, ¿no?
Dike:- (Poniéndose de pie) ¿Podemos hablar bien?
Nereo:- Yo con ella no tengo que hablar nada. No hay nada
para decir…
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En ese momento no pensé y dije todo. Sé que estuve mal, pero ya me quería ir >>
Dike:- Entonces hablo yo... Resulta que Galatea quiere volver
a salir con vos y me mandó a mí, como el año pasado, a hacerle gancho.
Galatea:- ¡Dike! Se supone que me tenes que ayudar… ¡Así no!
Nereo:- (Ríe) Esto es muy fuerte… Vos siempre cagona Galatea.
Galatea:- ¡No soy una cagona!
Nereo:- ¿Cómo se le dice a la gente que va por detrás?
Galatea:- Lo que pasa es que no sé cómo ibas a reaccionar.
Nereo:- ¡¿Y cómo querés que reaccione?!
Dike:- Como ahora no creo…
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Definitivamente, hablé de más, se notó en la cara de Galatea. Creo que no me
quería ver… >>
Nereo:- Vos a mi me engañaste con Psámate… Y la metiste en
todo esto a Dike…. La hiciste sufrir por mí. Y a mí, por vos… y por ella.
Galatea:- (Sorprendida) ¿Cómo que por ella?
Dike:- (Sorprendida) ¿Cómo por mí?
Nereo:- (Rodando sus ojos hacia arriba) Ahora empieza el
problema.
Galatea no dejó que éste termine y le dío una cachetada en su
mejilla izquierda.
Galatea:- (Enfadada) ¡¿Cómo es que ella te gusta?!
Nereo:- Cada vez que Dike me hablaba de vos, me iba
enamorando más de ella y menos de vos.
Galatea:- No puede ser. ¿Cómo te puede gustar la gorda de
8vo? ¿La nerd de la escuela?
Dike la miró con los ojos bien abiertos, nunca en su vida alguien
la había llamado así. Ella era de las chicas que no tienen un buen concepto de
sí mismas. En sus pensamientos, ya sabía que todos pensaban así. Pero una cosa
es pensarlo y otra, muy distinta y destructora, es confirmarlo. Saber que
alguien sí pensaba como vos sospechabas, que tus miedos a no ser aceptada por
los demás se incrementaran con unas simples palabras. Las personas pueden ser
muy malas cuando quieren, y no hay nada peor que una ofensa lógica. Porque las
palabras dañan más que los actos.
Y era evidente que su cuerpo iba a reaccionar de la forma más
natural del ser humano. Ante un daño, solo queda responder, retirarte o llorar.
O retirarte y luego llorar. O responderle y luego llorar. O llorar y
responderle. O alguna combinación de las tres.
Así que, Dike optó por la última opción. No es que ella lo
haya pensado, a veces el cuerpo reacciona sin consultarnos. Y lo hay más
remedio que soportarlo hasta que decida volver a lo que llamaríamos un estado
normal.
Ante ojos que comenzaron a nublarse, a llenarse de ganas de
llorar, ante una respiración agitada que intenta frenar lo inevitable, Nereo la
abrazó fuerte para contenerla.
Nereo:- ¡Sos una bestia! No te lo perdono más.
Galatea:- La que no te va a perdonar soy yo.
Nereo:- Andate, por favor.
Galatea se fue enojada dando pasos muy grandes y Nereo mantenía
sus brazos alrededor de Dike.
Dike:- (Alejándose de Nereo) Ella tiene razón. No te puedo
gustar yo.
Nereo:- ¿Por qué no? Yo tampoco soy un galán de película.
Dike sonrió ante el comentario de Nereo. Él solo quería que
ella olvidara las palabras ofensivas de ira que Galatea guardaba dentro de sí.
Nereo:- (Sonríe) Así te quería ver, sonreír y no sufrir por
una estúpida.
Dike:- Nereo, ¿por qué no lo dijiste?
Nereo:- Esto es raro… pero antes pensaba que yo no te gustaba
más. Y ahora que sentí tu ausencia por un mes y medio... Creo que te quiero más
que a mi vieja. Más que a River. Más que a mi propia vida.
Dike:- No digas eso tan rápido. Así te sentías con respecto a Galatea
y mirá como terminaron.
Nereo:- Pero con vos es diferente, te conozco desde primer grado,
te veo todos los días, sé como sos y vos sabés como soy.
Dike:- En eso tenes razón.
Nereo:- Además, vos jamás me traicionarías….
Nereo la miró a los ojos y luego buscó su boca para besarla.
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¡Por Dios! MI PRIMER BESOOOOO. ¡No lo puedo creer! Y es tan raro lo que sentí
en el roce de nuestros labios. Al principio fue frío ya que estuvimos mucho
tiempo afuera. Yo no dejaba de pensar en que yo tenía los labios resecos, que a
Nereo no le gustaba besarme, ya que era mi primer beso… y, básicamente, no
sabía qué hacer… >>
Nereo:- Y así, nos declaro oficialmente novios.
Dike sonrío, observó la hora de su reloj rosado y salió corriendo
sin darle explicación a Nereo que, sin otra opción corrió tras ella.
Taumante, que estaba hace un tiempo esperando por su hermana
fuera del local, los vio llegar juntos.
Taumante:- (Con los brazos cruzados) Creo que tengo mi primer
cuñado. Y papá… su primer hombre que será torturado, extorsionado e
interrogado.
Dike:- Tau, no empieces.
Taumante:- A menos que me pagues las horas del ciber…
Dike:- Está bien, es un chantaje muy considerado de tu parte
Tau.
Taumante:- Si, ahora, por favor, llévame a casa.
Dike saludó a Nereo y éste a Taumante.
Dike:- (Abriendo la puerta de la casa) ¿Como supiste?
Taumante:- (Entrando a la casa) Solo dije una mentira y
ustedes no me lo negaron.
Dike:- (Deteniéndose) O sea que… Voy a matarte Taumante.
Taumante corre en busca de refugio detrás de su madre, que
estaba cociendo varios pares de medias, y le contó que Dike iba a pagar las
horas del ciber.
Metis:- (Mirándola de reojo) ¿A qué se debe tanta cortesía
Dike?
Taumante:- (Sonriendo) A que es hora de que Dike se ponga las
pilas con su hermanito querido.
Metis:- ¿Y de dónde vas a sacar el dinero?
Dike:- Eso ya lo pensaré…
Dike se fue a su cuarto pensando en Nereo mientras se
cambiaba de ropa para estar cómoda en su casa. En eso sonó el teléfono.
Metis:- ¡Dike! Te llama un tal Nereo.
Dike:- (Bajando las escaleras rápidamente) ¡Ya voy!
Metis:- (Yendo a la cocina) Que raro, nunca atendió con tanta
rapidez.
Dike:- ¡Hola Nereo!
Nereo:- ¡Hola mi amor! ¿Cómo andas?
Dike:- Pensando.
Nereo:- ¿Qué raro vos pensando?
Se ríen los dos al mismo tiempo.
Nereo:- ¿Estás pensando en mi?
Dike:- Claro, ¿viste?… - Hace una pausa un tanto larga - No,
tonto. Estoy pensando cómo voy a hacer para pagarle las horas a Taumante.
Nereo:- Bueno, parece que tu querido novio tiene la solución.
Dike:- ¿Cuál es?
Nereo:- Parece que tu suegro tiene un hermano que tiene un
hijo que tiene un ciber y vos podés trabajar en él.
Dike:- ¡Fantástico! Pero podrías haber dicho que tu primo
tiene un ciber.
Nereo:- (Ríe) De todas formas, ¿quién dijo que voy a dejarte trabajar
con él?
Dike:- (Susurrando) No seas celoso.
Nereo:- Mirá que él es igual que yo... Sólo que rubio, alto y
de ojos celestes.
Dike:- (Riendo) Igualitos.
Nereo:- Bueno, pregúntale a tus viejos y me llamas.
Se despidieron de forma un poco distante ya que Dike no desea
que se conozca la situación sentimental actual en su casa. Ella subía las
escaleras cuando…
Metis:- (De brazos cruzados con cara de madre que sospecha
algo) ¿Quién es ese tal Nereo?
Dike:- Nereo es un compañero de clases, me llamó para saber
si lo iba a ayudar en la prueba.
Metis:- ¿No será “para la prueba”?
Dike:- No, en la prueba.
Dike se retiró sonriendo y Metis, convencida, prosiguió con sus quehaceres.
Luego de una noche de descanso Dike despertó viendo el rostro
de su madre que estaba, al lado, observándola.
Dike:- (Despertándose) ¿Qué hora es?
Metis:- Hora de que hablemos.
Dike se sorprendió ante la respuesta extraña que le había
dado su madre.
Dike:- ¿Qué pasa mamá?
Metis:- Hoy a la mañana, tipo 11:30, llegó una persona.
Dike:- ¿Qué persona?
Metis:- Eso no importa ahora. Lo que importa es lo que me
dijo.
Dike, por la preocupación, mezclada con nervios, cambió el
color de piel de rosada a blanca.
Dike:- ¿Quién era? Eso también es muy importante.
Metis:- Vino alguien y me contó lo de la plaza.
Dike se intentó poner de pie pero no lo logró y se desmayó al
instante.
Metis:- (Acariciando la cabeza de su hija que recién abrió
los ojos) Me contó lo de la pelea y de cómo terminó todo… Creo que me lo
tendrías que haber dicho Dike.
Dike:- (Un poco mareada) ¿Qué ma? ¿Qué te tendría que haber
dicho?
La madre la miró y sonrió con ternura, pero escondía muchas
sospechas sobre lo que Dike estaba ocultado.
Metis:- Creo que no nos entendemos.
Con estas palabras, se retiró dejándola sola en su cuarto. Dike
se destapó y se levantó de la cama pensando.
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¿Qué me habrá querido decir? Algo peor, ¿quién vino y qué le contó? Y algo aún
peor que lo de antes, ¿qué me va a
pasar? >>
Los hechos y/o personajes de la historia son ficticios,
cualquier semejanza con la realidad es mera coincidencia
Bajo licencia Creative Commons CC BY-NC-SA 3.0,
como se detalla en http://creativecommons.org/licens.
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